Poder otorgado por Juan Antonio Tavira, profeso de la orden de Santiago, a favor de Tomás González, canónigo de la iglesia de Plasencia y a Agustín Tavira Acosta, oficial de la secretaría de estado y del despacho, para solicitar ante el nuncio apostólico en Madrid la dispensa por haber ejercido durante un tiempo las funciones de alcalde del crimen de la Chancillería de Granada